DOMINGO 20 DE DICIEMBRE DE 2020
La violencia ha crecido en los hogares y en el país: Iglesia
El arzobispo de la arquidiócesis de Acapulco, Leopoldo González señaló que el nivel de violencia en el hogar no ha disminuido y exhortó a la cultura del encuentro
Cortesía | Arquidiócesis de Acapulco
Adriana Covarrubias | El Sol de Acapulco
El arzobispo de la arquidiócesis de Acapulco, Leopoldo González señaló que la violencia en el hogar ha crecido y no ha disminuido en el país y añadió que la palabra “no teman” es algo que se quiere escuchar en estos momentos.
En su mensaje de navidad que envío a los feligreses a través de la pagina oficial de la Arquidiócesis de Acapulco, hizo un llamado aquellos a quienes perpetran el mal en la delincuencia común o en el crimen organizado a que “dejen ese camino que ha sembrado tanto dolor y muerte”.
“No teman, es una palabra que necesitamos escuchar. Ha crecido el nivel de violencia en el hogar y no ha disminuido la violencia en nuestra Patria. Mirar en el Nacimiento el convivir del Niño Jesús, la Virgen María y Señor San José refuerce en nosotros la firme decisión de que nuestro convivir en el hogar esté libre de toda violencia”, precisó.
Dijo que es tiempo de fortalecer a la sociedad y la cultura del encuentro.
Pidió a todos hacer lo que esté de nuestra parte para que en el corazón de cada hombre y de cada mujer resuene el anuncio de paz que los ángeles hicieron escuchar en los campos de Belén.
En su mensaje de navidad, el prelado de la iglesia católica dijo qué hay tinieblas en las relaciones personales, familiares, sociales, pero más grande es en estos momentos la luz de Cristo.
El arzobispo Leopoldo González, señaló que a los feligreses que les gusta mostrar que son fuertes y resistentes, este año por la pandemia de Covid-19, los ha vuelto hacer conscientes de que son frágiles.
“Al vernos frágiles, muchos sentimos temblar nuestro corazón. Ahora Jesús nos dice: Ten paz. Mírame frágil como tú, necesitado de todo mundo. Nos hace mucho bien aceptarnos en nuestra realidad”, precisó.
“En estos días sigamos cuidando nuestra salud que es frágil, así cuidamos la salud también frágil de los demás. Tengamos esto muy en cuenta en nuestras celebraciones en familia y en nuestras expresiones de afecto. Nos necesitamos. Dios nos hizo unos para otros. Hemos aprendido que nadie se salva solo”, puntualizó.
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