ENTREVISTA A MONSEÑOR FELIPE AGUIRRE FRANCO, ARZOBISPO DE ACAPULCO, REALIZADA POR LA HERMANA ADRIANA MAZA COUTIÑO, DE LAS DISCIPULAS DE JESUS BUEN PASTOR.
CAPITULO XVIII: EL PRIMER AÑO, LA PRIMERA HIJA.
Cómo recibo a las primeras hermanas? Ah, pues con una alegría inmensa. Después del Adviento, viene la fiesta de la Navidad; yo las veía a todas tan alegres, como quien apenas está comenzando a ver la luz pero que ya es conciente de lo que es esa luz y saben que están dispuestas a correr los riesgos; jugarse el todo por el todo, como quien dice “quemar las barcas para no volver a la antigua forma de vida”, tirar las llaves al agua para no abrir la otra puerta, la que cerraron y a jugarse el todo por el todo. Las veía así con entusiasmo, como diciendo vamos a correr los riesgos de un proyecto que no sabemos qué va a ser de él, pero estamos dispuestas a caminar; Dios no nos defrauda y sabemos que vamos a empezar a caminar con esta Congregación. Así que las vi muy presurosas y disponibles a correr todos los riesgos.
Qué retos ve en la formación de este primer grupo? Pues, había que ayudarles a que vivieran mucho la unidad fraterna, para que pudieran convivir y pudieran formarse adecuadamente, que tuvieran un ambiente de familia y de una formación propicia; este primer grupo siempre es alguien al que se le ha dicho que tiene como reto: el TENER QUE ABRIR BRECHA en lo más difícil; dicen muy bien ellas, les he escuchado: “CAMINANDO Y ABRIENDO BRECHA”, creo que este es el reto en la formación de este primer grupo, porque lo que ellas han hecho, lo que ellas están haciendo, lo que ellas siguen haciendo después, siempre influirá necesariamente en toda la vida de esta naciente Congregación de DISCÍPULAS DE JESÚS BUEN PASTOR. Dios les ha dado esa vocación de ser Co-fundadoras, con todo lo azaroso que puede ser un proyecto de estos, lo incierto, lo inseguro, pero por encima está Dios que nos ha llamado.
“ABRIENDO BRECHA” quiere decir que vamos por delante, por donde el Espíritu Santo nos va impulsando pero quiere que nosotros vayamos en ese terreno de búsqueda; es uno de los retos constantes de este primer grupo, además de ser modelo, ejemplo, inspiración para las demás generaciones, es decir, lo que sea este grupo será en gran parte siempre toda la Congregación; así como marca la historia de la salvación el Pueblo Judío, el pueblo de Israel, así también será este grupo que marque toda la historia de esta Congregación de DISCÍPULAS DE JESÚS BUEN PASTOR.
Cuáles eran sus principales preocupaciones? Tener todos los documentos necesarios. Que estas muchachitas pudieran tener la suficiente asesoría espiritual, el acompañamiento de una Superiora, Directores espirituales que les pudieran llevar por el camino adecuado, y también los medios materiales que ellas necesitaban, dentro de su pobreza y privaciones para poder lograr su formación. Las visitaba y las veía cuando estaban comenzando y veía que estaban muy contentas, entonces creo que las preocupaciones de lo que se podría hacer se fue llevando a cabo y fue adelante gracias a Dios.
La preocupación qué comeremos, con qué nos vestiremos? Todo eso no contó tanto para mí porque sabía que la Providencia nos iba a alimentar y a acompañar para tener todo lo necesario, como así ha sido siempre, pero sobre todo la preocupación por su auténtica formación, porque una Congregación necesita tener Religiosas muy bien formadas, en todos los aspectos: humano, espiritual, académico, pastoral y sobretodo que vivan una vida de comunidad; yo les digo que mi preocupación es que tengan en su vida de comunidad su privacidad, su intimidad, su seguridad, pero sobre todo que sepan vivir una vida de comunidad para poder ir a la misión; una comunidad donde ellas se estimen mucho, se quieran bien, se fraternicen y sientan que son una verdadera familia.
Cómo se va desarrollando su relación con el P. Salvador y la M. Silvia. Progresiva, mientras más crecen las necesidades más hay que estar en relación, mientras hay más preocupaciones más hay que estar en relación con ambos y mientras más alegrías hay, pues también más hay que compartirlo y mientras más sobresaltos, problemas, conflictos o sinsabores existen porque todas las cosas tienen sus amarguras y hasta les he dicho yo muchas veces a la M. Silvia y al P. Salvador que nuestro camino en esto de “abrir brecha y de hacer camino” para esta Congregación; es como San José que va con la Sagrada Familia mezclando los gozos y las lágrimas “miscens gaudia fletibus”.
Cuáles son los lineamientos de la Fundación que trabajamos en este tiempo? Pues los esenciales. Bosquejar en general lo que queremos de una futura Congregación y bosquejar el estilo de vida, los estatutos que debe tener un grupo que se disponía a vivir en comunidad, porque hay que organizar la vida en comunidad, no hay que lanzarla para que se haga a la casualidad; es el Espíritu Santo el que la ilumina pero quiere estructuras para alentar con su divino viento, con su divina brisa y eso fue lo que tuvimos que hacer.
Algunos aspectos, algunos puntos en los cuales se iba a regir el Postulantado, la vida en comunidad, algo muy delicado, no podíamos decepcionar, frustrar, no podíamos engañar a las muchachitas que estaban por reunirse en comunidad, al llegar desde sus casas.
En qué ambiente realizan estos trabajos? En el ambiente de la pastoral. Desde luego que siempre fue un ambiente de fe, para saber lo que Dios quiere de este proyecto de Congregación y de relación, para saber lo que se iba a planear. En un ambiente de trabajos pastorales muy intensos, pues el P. Salvador trabaja mucho en la Pastoral Vocacional y como Padre Espiritual en el Seminario, luego la M. Silvia, también tenía muchos trabajos por parte de su Congregación y los trabajos de la Casa de San Marcos.
Con qué disposición o estado de ánimo me encuentro en este momento de mi vida? Todo hay que hacerlo con alegría, con mucho optimismo, mientras más se veía que esto se iba verificando pues más entusiasmo, más ardor, más brete, más deseos así de entusiasmantes había, para ser más creativos en la imaginación para poder llevar a cabo esta obra; así que en estos momentos de mi vida hay un ambiente de mucho optimismo, estamos dispuestos a correr los riesgos, pero no es algo que nos atemoriza sino algo que nos entusiasma.
Cómo se va dando la formación de las hermanas? Con mucha cercanía, con todos los elementos a nuestro alcance; el mármol nunca llega pulido totalmente a las manos del escultor, tiene que llevar a cabo un trabajo de cincelar, figurar y pulir; es preciso que sea desgastante el trabajo, podemos decir que esa cercanía de diálogo, el grupo también pequeño favoreció mucho esto, las plegarias de la gente y de toda la Iglesia por ellas.
Cuáles eran los retos que se presentaban en la Fundación? Ya habíamos hablado con los Obispos, especialmente con Mons. Raúl Vera, con Mons. Ramón Godínez, con quienes sabían de la vida Religiosa, ya habíamos visto otras Congregaciones cómo habían emprendido sus primeros pasos, y ahora el reto era comenzar propiamente. Cuándo podría ser bueno? Recuerdo que el primer año inició con la Misa del 8 de septiembre de 1992 en la Parroquia de Ntra. Sra. del Sagrado Corazón que me tocó presidir; sí era una media mañana del 8 de septiembre en el día de la Natividad de la Virgen María, cuando se inició el Postulantado.
También ese día es la natividad de los primeros pasos de la primera comunidad en orden a este proyecto de vida consagrada de DISCÍPULAS DE JESÚS BUEN PASTOR bajo la mirada amorosa de la Virgen Santísima y de su corazón santísimo, celebré la Eucaristía, veía a toda la gente muy llena de esperanzas, veía también a las candidatas a iniciar el Postulantado; después nos llevamos al Santísimo Sacramento por las calles, ¡que hermoso momento! En donde vamos acompañando a la Iglesia toda universal, encabezada por Jesucristo, vamos acompañando a esta Iglesia al alumbramiento de una nueva Congregación y así hasta que llegamos con la procesión con el Santísimo Sacramento por la calle hasta llegar a la casa, que fue la primera residencia de las DISCÍPULAS DE JESÚS BUEN PASTOR como Postulantes. Así fue entonces, el primer paso de este postulantado, ¡bendito sea Dios!
Ahí iba con nosotros en la procesión hasta la casa el P. Salvador, concelebrando conmigo y muy cerca la M. Silvia y luego el pequeño grupo, la pequeña grey del Señor, las ocho primeras co-fundadoras y luego las bienhechoras y los bienhechores que nos acompañan hasta llegar a la casa de Don Chus Orantes Aramoni y de Doña Elisa, llegamos hasta ese lugar, hasta la casa. Presidió la casa siempre el Sagrario y la imagen de Jesús Buen Pastor, lo mismo la imagen de la Santísima Virgen María, donde se consagran todos aquellos que quieren seguir radicalmente a Jesucristo con la vida del Evangelio.
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